Musimundo, lejos de lo que sucede con otras cadenas, abrió las puertas de su sucursal 211 en el Shopping Abasto de la ciudad de Buenos Aires.
Seguramente más de un lector tendrá en sus recuerdos ir a un Musimundo por ese nuevo CD de Charly García o por unos buenos auriculares Sony Fontopia (Primera generación claro). Hablamos de hace más de 30 años quizás, pero es probable que las nuevas generaciones no sepan que los comienzos de la marca fueron al compás de la música. La empresa antes de su transformación a cadena de retail de electrodomésticos, era una importante cadena de disquerías. (De allí su nombre Musimundo, y no por ejemplo, Electromundo).
Luego, cuando la transformación digital y las nuevas costumbres de consumo de la música llegaron, hábilmente supieron darle un giro rotundo a su negocio. De esta manera y luego de casi quebrar, esta transformación logró que la marca perdure en el tiempo y haya resurgido como lo que hoy representa.
MUSIMUNDO NO SE ACHICA
Musimundo, como tantas empresas del país ha tenido sus vaivenes. En este momento y después de un 2020 complicado especialmente por el contexto de la pandemia y en donde muchas empresas han decidido cerrar sucursales, Musimundo, además del desarrollo de su tienda on line y como parte de su sostenida estrategia de crecimiento, inauguró el año abriendo su sucursal 211.
Se trata de un nuevo espacio que revive su presencia en el Shopping Abasto. En el local 16 del centro comercial, la compañía ofrece asesoramiento personalizado a sus clientes. La ideases que puedan consultar y adquirir productos tecnológicos y de entretenimiento, como smartphones, televisores, notebooks y tablets.
Ya te das cuenta que Musimundo, con sus planes de expansión, sigue haciendo lo posible para cada vez más formar «parte de tu mundo».